La presente contribución pretende dar a conocer la diversidad del género Ipomoea en el estado de Michoacán, así como ofrecer una clave dicotómica para la determinación de sus especies y variedades e incluir imágenes que ilustren su distinción y a la vez apoyen el proceso de su identificación. El género Ipomoea de la familia Convolvulaceae agrupa representantes de los más conspicuos y llamativos en la flora mexicana, principalmente durante los meses lluviosos del año, pero sin faltar tampoco durante la época seca. Estas plantas muestran una gran diversificación en su morfología, por lo que es común encontrar desde pequeñas herbáceas, hasta grandes lianas, arbustos y algunos árboles; se observan tallos volubles, trepadores o erguidos ofreciendo diferentes portes. Las flores exhiben una amplia gama de colores, que varían desde el blanco hasta los matizados de azul, rojo o amarillo en diferentes tonalidades; su tamaño y forma también son diversos. Las hojas pueden ser simples o compuestas (pinnati- o palmatisectas) y en cuanto a su figura generalmente varían de lanceoladas a ovadas u orbiculares, enteras a 3 a 7-lobadas, con el ápice agudo, acuminado, atenuado o solamente mucronado y la base truncada, cordada, hastada, auriculada, cuneada o redondeada. Respecto al indumento de las diferentes partes de las plantas existe también bastante discrepancia, así con frecuencia se observan estructuras glabras o con distintos tipos e intensidades de pubescencia, siendo algunos de los más comunes el hirsuto, tomentoso, híspido y lanoso. En cuanto a las semillas, éstas pueden ser glabras o en muchos de los casos presentar diversas clases de pelos de tamaño variable, caracteres diagnósticos principalmente de algunos grupos infragenéricos. Este género es uno de los mejor representados en la flora de la República Mexicana y la mayor diversificación se ubica en las zonas tropicales, principalmente en hábitats modificados por la mano del hombre (McDonald, 1991; Rzedowski, 1978; Carranza, 2001). En el territorio del estado de Michoacán se encuentran abundantes lugares adecuados para el establecimiento de estas plantas (Carranza, 2005b), propiciados tanto por su amplia variación ecológica, como por el alto grado de alteración en muchos de los ambientes de las regiones cálidas del mismo. Son escasos los trabajos que agrupan o mencionan las especies de este género en el estado, sin embargo en el listado florístico para Michoacán de Rodríguez y Espinosa (1996) se enumeran 48 (de las cuales se aceptan aquí 43 nombres válidos). En 2005, Carranza define un total de 66 taxa, sin proporcionar sus nombres. En varios estudios regionales en los que se describe la flora y/o la vegetación de localidades particulares se hace mención de la presencia de algunas especies de Ipomoea.

Familia de unos 18 (20) géneros y unas 250 (300) especies, de distribución casi cosmopolita pero de manera preferente en las regiones templadas y tropicales del Hemisferio Norte. Algunos representantes de géneros como Nemophila, Phacelia y otros se cultivan como ornamentales. En la región de esta Flora se han encontrado cuatro géneros y 15 especies.

El conocimiento de los recursos vegetales en el estado de Guanajuato está incompleto hasta la fecha. La ubicación de la entidad en el centro de la República Mexicana y todas las facilidades de infraestructura y accesibilidad, no han sido suficientes para explorar su territorio y estudiarlo desde el punto de vista biológico. Sin embargo, actualmente se ha obtenido información importante sobre las plantas que crecen allí de manera espontánea, gracias al proyecto Flora del Bajío y de Regiones Adyacentes, que está llevando a cabo el Instituto de Ecología A. C., cuyo inicio data de 1985 y su área de influencia comprende además al estado de Querétaro y a la porción septentrional de Michoacán. Básicamente con las exploraciones realizadas, se ha integrado una colección de ejemplares herborizados de diferentes regiones de la entidad y se han hecho algunos estudios botánicos con temáticas específicas. Lo que en este trabajo se pretende y que está fundamentado en todo lo anterior, es hacer algunas estimaciones y especulaciones sobre la diversidad florística guanajuatense, además de analizar lo que hasta ahora se sabe sobre plantas endémicas, mencionar ciertos aspectos de las comunidades vegetales, así como enfatizar la existencia de varias áreas de particular importancia para su conservación.

Se reconocen de 7 a 9 géneros con más de 50 especies, que se distribuyen principalmente en las regiones tropicales del Viejo Mundo. En el continente americano se aceptan cuatro géneros, los cuales también están representados en México, pero sólo dos se localizan en el área de esta Flora, Bdallophyton y Pilostyles.

Familia de 15 a 18 géneros y 150 a 200 especies principalmente del Hemisferio Norte, pero extendiéndose a las zonas subtropicales y tropicales del Hemisferio Sur. La madera de algunas especies se usa para construcción, mientras que otras se cultivan con fines ornamentales.