El embarazo y el parto es un período especial en la vida de la mujer, ya que tiene implicaciones físicas, hormonales y psicológicas, además de cambios sociales y culturales que pueden influir en su sexualidad. Múltiples factores se han asociado con un aumento en la frecuencia de disfunción sexual durante la gestación y el posparto, la cual puede alcanzar una incidencia hasta del 50% en estas etapas. Objetivo: Evaluar la prevalencia de disfunción sexual durante la gestación y su relación con algunos factores de riesgo y describir el comportamiento sexual de las mujeres embarazadas y postparto. Métodos: Estudio de corte transversal de pacientes embarazadas y postparto inmediato de tres centros médicos de atención obstétrica de la ciudad de Medellín. Resultados: Por medio de una encuesta personal se evaluaron 259 mujeres en embarazo y posparto en 3 diferentes centros de atención obstétrica de la ciudad de Medellín. Se encontró una prevalencia de disfunción sexual femenina del 60,2%. El tipo más frecuente de relaciones sexuales fue la vaginal (69%). El 85% de las madres y el 71,4% de los padres consideraban que existía riesgo de un posible daño al bebe con las relaciones sexuales. El 59,1% de las embarazadas recibieron información sobre sexualidad durante la gestación, siendo el 30% por parte del médico y se asoció como factor protector para disfunción sexual, junto con la estabilidad de la pareja. Como factores de riesgo se identificó el régimen subsidiado del sistema de seguridad social y la idea de daño al embarazo por parte de la madre. Conclusión: La disfunción sexual es una entidad con una mayor prevalencia y algunas consideraciones especiales durante el embarazo, comparado con la población general. Debido a esto, los profesionales de la salud deben explorar este aspecto en la atención prenatal y brindar una adecuada información sobre la seguridad de las relaciones sexuales durante el embarazo y los posibles cambios en el deseo, el alcance del orgasmo y la satisfacción sexual.