La enfermedad de Parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa con más prevalencia a nivel global. La mejor forma de tratar los síntomas motores del Parkinson es a través de la combinación de medicamentos y fisioterapia. Receintemente, se ha propuesto el uso de la realidad virtual inmersiva como herramienta para aplicar diversos ejercicios físicos de rehabilitación que pueden adaptarse a las necesidades de cada paciente de acuerdo con la progresión de la enfermedad. Existe evidencia que apoyan la idea de que el tratamiento por medio de realidad virtual puede mejorar los síntomas motores del Parkinson a corto plazo. No obstante, aún se requiere de mayores estudios para comprender los mecanismos de acción de esta tecnología y del trabajo en conjunto de diversos especialistas para diseñar tratamientos efectivos y seguros.