Se exploró en una población de mujeres embarazadas que acudieron a control pre natal la exposición de sus hijos e hijas menores de 18 años como testigos de violencia doméstica. Investigación retrospectiva, con fuentes secundarias, de 635 mujeres embarazadas en control pre natal de hospitales públicos con muestreo consecutivo. Se aplicó la Escala de Gelles y Straus y estadística descriptiva y analítica. 1222 niños, niñas y adolescentes menores de 18 años fueron testigos de distintos tipos de violencia en tanto 462 no. En el En el 71,8% (456) de los hogares, la población fue testigo de violencia psicológica, siendo el 72,6%, (331 hogares) con bajos ingresos (entre 500.000 y 1.000.000 gs); 10,7% (48 hogares sin ingresos) y un total de 1222 menores de 18 años. En el 26,9% (171 hogares) testigos de violencia física, siendo el 74,3% (127 hogares) con bajos ingresos (entre 500.000 y 1.000.000 gs); 7,6% (13 hogares) sin ingresos y un total de 364 menores de 18 años. Factores de vulnerabilidad socio-económica acompañan a mayoría de hogares con mujeres embarazadas y población infanto juvenil víctima y testigo de violencia doméstica.
El consumo de alcohol contribuyó con la muerte de alrededor de 300.000 personas en 2012. Esta substancia puede encaminar a la dependencia, así como elevar el riesgo de desarrollar más de 200 enfermedades en las personas, incluyendo cirrosis hepática y ciertos tipos de cáncer. Al menos uno de cada seis habitantes del mundo es un adolescente, por lo que 1.200 millones de personas tienen entre 10 y 19 años. Las personas consumen una media de 8,4 litros de alcohol puro por año en América Latina y el Caribe, lo que supone 2,2 litros más que el promedio mundial. Los países en donde más se consume alcohol en la región son Chile (9,6 litros); Argentina (9,3 litros); Venezuela (8,9 litros) y Paraguay en cuarto lugar con 8,8 litros de alcohol per cápita de consumo. Los jóvenes en su mayoría tienen buena salud, pero la mortalidad y la morbilidad entre los mismos siguen en aumento. Su salud y la de sus hijos pueden verse afectadas por el consumo de alcohol. Más de la mitad de los estudiantes de secundaria en Paraguay, jóvenes de entre 13 y 17 años, consumió alcohol en el año 2014. El consumo nocivo de alcohol en adolescentes preocupa cada vez más en muchos países, ya que reduce el autocontrol y aumenta comportamientos de riesgo.
Introducción: las normas sociales y culturales tradicionales de género con frecuencia hacen a las mujeres más vulnerables a la violencia infligida por la pareja. Objetivo: se buscó asociar las creencias sobre autonomía y derechos sexuales con violencia en puérperas víctimas. Materiales y métodos: investigación retrospectiva, con fuentes secundarias y muestreo consecutivo. 304 puérperas fueron entrevistadas en un hospital público con un cuestionario estructurado que contenía características socio-demográficas, la Escala de Gelles y Straus para medir diferentes formas de violencia y un listado de 11 dichos populares. Se utilizó estadística descriptiva y analítica para el análisis de la información. Resultados: 32,2% (98) fue víctima de violencia Psicológica; 8,6% (26) de violencia física; 8,6% (26) abuso sexual. Se encontró una correlación (p < 0,000) entre víctimas de violencia psicológica y quienes portaban creencias en Quien te quiere te aporrea y (p < 0,039) Si a una mujer el marido le golpea, por algo será. Correlación (p < 0,000) entre víctimas de violencia física y acuerdos con Quien te quiere te aporrea y (p < 0,035) Si a una mujer el marido le golpea, por algo será, entre otros. Conclusiones: Mayoría estuvo de acuerdo con dichos sobre autonomía de la mujer y derechos sexuales y en desacuerdo con aquellos de violencia de género. Finalmente es de destacar la asociación significativa entre una minoría de puérperas, víctimas de violencia de diferentes formas, que estaba en desacuerdo con la autonomía y derechos sexuales y de acuerdo con expresiones que legitiman violencia de género.
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