Boaventura de Sousa Santos, (2020) en su libro la cruel pedagogía del virus expone acerca de la normalidad excepcional de la pandemia por covid-19, no fue una situación de emergencia, lo que se opone claramente a una situación normal. Desde los años 80, cuando el neoliberalismo se consagró como la versión dominante del capitalismo y obedecía cada vez más a la lógica del sector financiero, el mundo ha vivido en un constante estado de crisis. Situación doblemente anormal. Por otro lado, la idea de una crisis permanente es un oxímoron porque, etimológicamente, una crisis es de carácter excepcional y temporal, ofreciendo una oportunidad para alcanzar un mejor estado de las cosas. Por otro lado, si la crisis es temporal, debe explicarse los factores que la provocan. Pero si se hace permanente, la crisis se convierte en la causa que explica todo lo demás. Por ejemplo, la crisis financiera en curso se usa para explicar los recortes de políticas sociales (atención médica, educación, seguridad social) o las disminuciones de salarios. Por lo tanto, nos impide preguntarnos las verdaderas razones de la crisis. El objetivo de la crisis permanente no debe resolverse. Pero ¿cuál es el propósito de este objetivo? Básicamente, hay dos: la legaliza la escandalosa concentración de la riqueza y la boicotea las medidas efectivas para prevenir el inminente desastre ecológico.Así hemos vivido los últimos cuarenta años. Por tanto, la pandemia agudizó la situación de crisis en la que cayó la población del mundo. Por lo tanto, presenta un riesgo particular. En muchos países, los servicios de salud pública estaban mejor preparados para hacer frente a una pandemia hace diez o veinte años que durante la pandemia actual. En cada época histórica, las formas de vida dominantes (trabajo, consumo, ocio, convivencia) y las formas de prevenir o retrasar la muerte son relativamente rígidas y parecen derivar de reglas inscritas en el núcleo de la naturaleza humana.
Cada sociedad crea una cultura en la que podemos confiar, para garantizar un marco institucional funcional y estructural, de manera que el sistema sobreviva a los cambios sociales, políticos, económicos, ideológicos y normativos, con la permanencia de la suficiente adaptabilidad y resiliencia, para que los conflictos provocados por todos los cambios, puedan ser superados y transformados en procesos efectivos de renovación social. La sociedad se realiza en presencia de diversos grupos, comenzando por la familia como grupo primario, lo que permite iniciar la socialización de los individuos y el aprendizaje de la cultura. La familia incluye, entre otras cosas, la escuela, el trabajo, la iglesia, las comunidades; los anteriores como espacios que fortalecen la integración a la sociedad y la formación de la identidad cultural, en otras palabras, como lo describe Ramírez (2002): Me hago miembro de la sociedad y me identifico con sus normas, ideas y costumbres, las mismas que sigo y protejo.Ahora bien, Las distintas sociedades del mundo reconocen la existencia de grupos sociales muy diversos, cuyos individuos interactúan a través de lazos socioeconómicos y culturales similares, y tal vez, más complejos que la sociedad que los acoge. Esos grupos se identifican como etnias, originarios o nativos, un ejemplo bastante ilustrativo, es el caso de la sociedad del Perú, donde viven alrededor de 50 pueblos indígenas que hablan su propia lengua, lo que llevó al antropólogo José María Arguedas, en el siglo pasado, en catalogar al Perú como “La nación de todas las sangres” (Arguedas-1964). El Perú es catalogado, como un país plurilingüe y pluricultural, y se ha observado una transición del paradigma oligárquico excluyente al paradigma inclusivo, populista pero homogeneizador. En el contexto descrito, se destaca el panorama de aprendizaje actual, constituido por aulas multiculturales, conformadas por estudiantes de diversos orígenes geográficos, étnicos, lingüísticos y culturales, que demandan nuevas habilidades, conocimientos, actitudes, propuestas didácticas y pedagógicas por parte de los docentes, que posibiliten la gestión del aprendizaje en este tipo de aulas, además de considerar nuevos tipos de relaciones con la comunidad educativa circundante. Sin embargo, al capacitar a los docentes para trabajar en un contexto multicultural, algunos requisitos especiales de la nueva educación multicultural, en algunas oportunidades, no se considera en su plan de estudios. El papel del docente en esta nueva configuración de la escuela y de la educación es absolutamente trascendente. Además, el papel de los docentes como educadores, más que simples transmisores de información, implica nuevas responsabilidades sociales, pues ahora tienen la responsabilidad de promover un espíritu tolerante de respeto y convivencia en la escuela, en el marco de los principios democráticos de igualdad y solidaridad. Sin embargo, no se puede negar que muchos docentes siguen siendo pasivos en sus aulas culturalmente diversas, lo que tiene implicaciones importantes para el funcionamiento de una escuela democrática, pluralista y heterogénea. Por ello, el propósito de esta obra es fomentar las reflexiones y recomendaciones sobre la heterogeneidad de las naciones, la educación intercultural y la formación de docentes respondiendo a los desafíos de la multiculturalidad en las escuelas, para que todos los estudiantes sean considerados reconociendo su individualidad y la legitimidad de su cultura, aplicando en las actividades educativas, los principios de cooperación, solidaridad y convivencia armónica en la diversidad cultural de los países de la región.Iniciamos la obra, citando parte del análisis en esta materia, realizado por Pablo Freire:“Una de las tareas más importantes de la práctica educativo-crítica, es propiciar las condiciones para que los educandos en sus relaciones entre sí y de todos, con el profesor o profesora puedan ensayar la experiencia profunda de asumirse. Asumirse como ser social e histórico, como ser pensante, comunicante, transformador, creador, realizador de sueños, capaz de sentir rabia porque es capaz de amar. Asumirse como sujeto. La asunción de nosotros mismos no significa la exclusión de los otros.”
scite is a Brooklyn-based organization that helps researchers better discover and understand research articles through Smart Citations–citations that display the context of the citation and describe whether the article provides supporting or contrasting evidence. scite is used by students and researchers from around the world and is funded in part by the National Science Foundation and the National Institute on Drug Abuse of the National Institutes of Health.
customersupport@researchsolutions.com
10624 S. Eastern Ave., Ste. A-614
Henderson, NV 89052, USA
This site is protected by reCAPTCHA and the Google Privacy Policy and Terms of Service apply.
Copyright © 2024 scite LLC. All rights reserved.
Made with 💙 for researchers
Part of the Research Solutions Family.