Can the Adoption of Desalination Technology Lead to Aquifer Preservation? A Case Study of a Sociotechnical Water System in Baja California Sur, Mexico

Abstract

Abstract:There is growing concern about the sustainability of groundwater supplies worldwide. In many regions, desalination-the conversion of saline water to freshwateris viewed as a way to increase water supplies and reduce pressure on overdrawn aquifers. Using data from reports, articles, interviews, a survey, and a focus group, this paper examines if, and how, the adoption of desalination technology can lead to aquifer preservation in Baja California Sur (BCS), Mexico. The paper outlines existing institutional arrangements (i.e., laws, rules, norms, or organizations) surrounding desalination in BCS and concludes that there are currently no effective mechanisms to ensure aquifer preservation. Four mechanisms that could be implemented to improve groundwater management are identified, including: 1) integrated water-and land-use planning; 2) creation of an institute responsible for coordinated and consistent planning; 3) improved groundwater monitoring; and 4) implementation of water conservation measures prior to the adoption of desalination technology. This paper concludes that viewing water technologies, including desalination, as sociotechnical systems-i.e., a set of technological components that are embedded in complex social, political, and economic contexts-has the potential to create a more sustainable human-environment-technology relationship. By assessing desalination technology as a sociotechnical system, this study highlights the need to focus on institutional development and capacity building, especially within local water utilities and urban planning agencies.

Trust matters: Why augmenting water supplies via desalination may not overcome perceptual water scarcity

“…Desalinated water is promoted not only as an additional source of freshwater, but as a quality-controlled, premium form of "produced water" that is free of contaminants. Additionally, it can be viewed as a "green" technology where the use of desalinated water has the potential to reduce pressure on freshwater resources and allow more water for ecological flows [11,39]. In Spain, for example, desalination was promoted as a "…local, democratic, market efficient and ecologically sustainable" solution, when compared to the controversial solutions to scarcity such as inter-basin water transfers and river diversions [34].…”

La desalinizadora de agua de mar en Playas de Rosarito. Un proyecto estratégico frente a la dependencia del Río Colorado y la escasez de agua en Baja California

“…Las evaluaciones de impacto de la desalinización en regiones como el Medite rráneo para el caso de Israel y España, y el Mar Rojo, el Golfo Pérsico y Australia, su gieren que lo más importante es que se atienda de manera prioritaria la construcción o reforzamiento de los mecanismos institucionales de carácter regulatorio para ges tionar la infraestructura tecnológica y sus resultados, sobre todo en países donde la institucionalidad es débil (McEvoy, 2017). Lo más importante es el desarrollo de capaci dades institucionales, lo mismo en las empresas locales de agua (organismos operado res) como en las oficinas de planeación urbana, puesto que la debilidad institucional hace que esos organismos sean susceptibles a la corrupción (McEvoy, 2017;Morote et al, 2017).…”

“…En este punto es importante destacar la pertinencia de las recomendaciones de algunos autores para priorizar la construcción de marcos institucionales que regulen este tipo de proyectos tecnológicos, con objeto de que sean incluyentes y se transpa renten los procesos, lo cual evitaría la corrupción y prevendría daños ambientales (McEvoy, 2017). En este caso, la forma en que se concibió el proyecto y se condujo el proceso de aprobación responde al perfil tecnocrático que privilegia la legitimidad técnica y el consenso de élites técnico-financieras sobre las de orden social para la toma de decisiones, es decir, un proceso tecnogerencial tal como lo conceptualizan Synge douw y Williams (2016), y el resultado hasta ahora está a la vista.…”

“…Para efectos prácticos, el país se adhirió a la ten dencia en el desarrollo de ese tipo de proyectos en regiones áridas con precipitaciones escasas y eventos de sequías prolongadas. Con anterioridad, empresas privadas del ramo turístico ya habían instalado plantas desalinizadoras para el abasto de sus com plejos en Baja California Sur y Quintana Roo; pero la primera y única planta que había venido operando desde 2007 para el servicio municipal es la de Los Cabos (Pombo et al, 2008;McEvoy, 2017). En Hermosillo, en el periodo de gobierno de Armando Ló pez Nogales (19972003), se intentó sin éxito la construcción de una planta de este tipo para abastecer la ciudad.…”