Choline Intake Correlates with Cognitive Performance among Elder Adults in the United States

Abstract

Objective. This research attempted to explore the neuroprotective effect of choline and establish evidence for future dietary recommendations and nutritional interventions to maintain a proper cognitive function among elders aged >60 years in the US. Method. This cross-sectional study retrieved data of 2,393 eligible elderly participants from the 2011-2014 National Health and Nutrition Examination Survey. Combining dietary and supplement choline intake, total choline intake was evaluated using the 24-hour dietary recall method and the dietary supplement questionnaire. Total choline intake was categorized into tertiles, which ranged at <187.60 mg/day (T1), 187.60-399.50 mg/day (T2), and >399.50 mg/day (T3). The Consortium to Establish a Registry for Alzheimer’s Disease (CERAD) Word Learning subtest, Animal Fluency (AF) test, and Digit Symbol Substitution test (DSST) was used to measure cognitive function. Participants who scored the lowest 25th percentile in each cognitive test were classified in the low cognitive function (LC) group. Logistic regression models were implemented to examine the association between total choline intake and the incidence of LC. Results. In the CERAD test, the risk of LC was significantly lower in T2 than T1 (OR: 0.668, 95% CI: 0.493-0.904, and P = 0.006 ) when adjusted for age, gender, BMI, alcohol consumption, and hypertension. Similarly, T2 was associated with a significantly lower risk of LC when assessed by the AF test (OR: 0.606, 95% CI: 0.580-0.724, and P < 0.001 ) and DSST (0.584, 95% CI: 0.515-0.661, and P < 0.001 ). In all three cognitive measures, the T3 of the total choline intake was not associated with cognitive function compared to T1. Conclusion. Total choline intake at 187.06-399.50 mg/day reduces the risk of LC by approximately 50% compared to intake at <187.6 mg/day. The findings of this research may be used to establish dietary recommendations and nutritional interventions to optimize the cognitive function among elders.

Neuronutrición: repercusiones de los excesos y de las deficiencias nutricionales

“…Regula la señalización colinérgica cerebral a través de la síntesis de acetilcolina, la señalización transmembrana y el metabolismo lípido-colesterol. A través de sus metabolitos participa en las vías que regulan la metilación de los genes relacionados con la memoria y las funciones cognitivas en diferentes etapas del desarrollo cerebral y es un donante de metilo necesario para el crecimiento y desarrollo normal del cerebro (51,52) .…”

Revista completa Vol 5 N 3

“…Por otra parte, no se observaron asociaciones con el conocimiento nutricional de potasio o la ingesta media de este mineral. Este hallazgo concuerda con estudios transversales previos en personas en TRR (52)(53)(54) ; en ellos se señala cómo el potasio de la dieta explicó menos del 2% de la variación del potasio sérico. En conjunto, esta evidencia sugiere que más allá de la ingesta dietética, otros factores pueden tener un impacto mayor en el potasio sérico de los participantes de este estudio, como lo fue el nitrógeno ureico en sangre.…”

“…Estas son absorbidas en el intestino delgado por simple difusión o transporte activo, liberándose de los alimentos por acción de las enzimas digestivas, salvo la vitamina B 12 , que se absorbe mediante un proceso complejo en el que participan las proteínas salivales y el factor intrínseco sintetizado en el estómago. El ácido fólico y la vitamina B 12 no se depositan en el organismo, el exceso ingerido se elimina por la orina (33,52,55) .…”

“…Su absorción en promedio es de 50 % en relación con las formas sintéticas agregadas en los alimentos fortificados o presentes en los suplementos. Las dosis se deben expresar en equivalente de folato de la dieta (EFD): 1 μg de EFD = 0,5 μg de suplemento tomado con el estómago vacío (25,33,52) .…”

“…Sus funciones se relacionan con la eritropoyesis y la deficiencia lleva a anemia macrocítica. Interviene en el desarrollo del tubo neural durante el período periconcepcional, es por ello que en mujeres en edad fértil se recomienda la ingesta de 400 μg "extra" provenientes de suplementos o alimentos fortificados (52) .…”