Learning and representation: the construction of masculinity in football. An analysis of the situation in Spain

Abstract

This essay examines the construction of masculinity through football in Spanish society. The results are presented from a study whose main objective was to investigate to what degree the changes that have occurred in the past few years with regard to the construction of masculinities can also be extended to the football setting. In order to carry out the research, qualitative interviews were conducted with fans, groups of fans, coaches, physical education teachers and youth and professional footballers. The essay concludes that Spanish football continues to be a space in which a hegemonic masculinity is reproduced, and this is due to the influence of various social agents who facilitate and induce the learning and representation processes of this hegemonic masculinity. We have called this type of masculinity, inductor masculinity.

Sport, Identity and Inclusion in Europe

“…To this end, society takes as references cultural stereotypes associated with appearance and bodily practices, establishing mechanisms for stigmatisation or social rejection of those cultural images that contradict this ideal of natural heterosexuality. A situation that is particularly evident in specific sports like football or American football, where hegemonic masculinity is still flourishing without contestation (Kian et al, 2011;Llopis-Goig, 2008).…”

El control de la violencia deportiva en el fútbol profesional español (1985-995). [Sporting violence curving in Spanish professional football (1985-1995)].

“…Dentro de esa relación, los futbolistas entienden que su posición en el equipo depende fundamentalmente de mostrar una buena actitud, consistente por un lado en la lealtad y subordinación al entrenador, pero también por un compromiso en el campo que incluye una enorme agresividad en las disputas por el balón (Roderick, 2003). Todo ello formaría parte de una masculinidad agresiva (Parker, 1996;Roderick, Waddington, y Parker, 2000) que incluye también soportar el dolor o jugar lesionados por el bien del equipo (Parker 1996;Roderick 2003;Bertrand 2009;Llopis 2008). Igualmente existe una cultura de la hipercompetitividad, debido a la incertidumbre profesional, y de una defensa de la agresividad que comienza en el periodo formativo (Bertrand, 2009;Parker, 1996), rasgos todos ellos que parecen ser constitutivos de la profesión desde sus inicios históricos (Harding & Taylor, 2003).…”

La creación de penas de mujeres: ¿Un desafio a la configuración del sistema sexo/género en el futbol espanol?

“…Un rasgo es, no obstante, común a casi todas ellas: su fuerte ethos o carácter masculino. Algo poco sorprendente si se tiene en cuenta que, en España, durante mucho tiempo, el fútbol ha sido considerado como «cosa de hombres» (Campo, 2003;Campo y Sánchez, 2013;Llopis-Goig, 2008y 2010, un espacio de construcción de la masculinidad en el que la mujer únicamente podía estar presente como mera acompañante (Llopis-Goig, 2010: 62). Una prueba de ello es que, a mitad de la década de 1960, clubes como el Granada CF o el Athletic de Bilbao aún asimilaban a sus socias a la categoría de infantiles, por lo que no tenían ni voz ni voto en las asambleas (Verdú, 1980).…”