Los sistemas de salud están expuestos a diversos desastres que pueden impactar en la eficacia y calidad de servicio que ofrecen. Por ello, es importante contar con elementos que les permitan tener una adecuada infraestructura y organización. Este texto delinea algunos de estos elementos y acciones, cuya incorporación en los hospitales permitirá brindar una respuesta oportuna en caso de desastre. Se expone el uso del triage como un instrumento que regula el ingreso de los pacientes a los hospitales y se analiza cómo el inadecuado uso de éste durante una situación de desastre puede cobrar la vida de las personas lesionadas. Por último, se propone la preparación de un hospital ante posibles desastres y se retoma la experiencia de otro en el marco de los sismos ocurridos en México en 2017.