La colocación de catéteres ureterales doble-J es uno de los procedimientos más realizados en Urología, con bajas tasas de complicaciones graves. No obstante, pueden ocurrir y requieren de una identificación y tratamiento precoz. Presentamos el caso de un varón de 73 años intervenido de una prostatectomía radical, al que se le coloca un catéter doble-J por sospecha de lesión ureteral durante la intervención, con inestabilidad hemodinámica en el postoperatorio inmediato secundaria a la migración del catéter a la vena cava inferior.