ResumenPerú es un país megabiodiverso que está experimentando una cantidad considerable de cambios antropogénicos que ponen en riesgo sus ecosistemas. La ciencia ecológica puede aportar respuestas sobre cómo afrontar el cambio explorando nuevas formas de utilizar los ecosistemas de forma sostenible. Aquí revisamos el estado actual y las tendencias de los estudios ecológicos mediante una búsqueda en bases de datos con el objetivo de responder a las siguientes preguntas: (i) ¿quién ha estudiado los ecosistemas peruanos y qué impacto ha tenido esa investigación? (ii) ¿cuáles son las regiones políticas y ecológicas más estudiadas en el país? (iii) ¿cuáles son los taxa más estudiados? (iv) ¿cuáles son las variables más estudiadas? y (v) ¿cuáles son los temas más estudiados y su relación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)? Para responder a estas preguntas, realizamos una revisión sistemática utilizando la base de datos Scopus (1974–2022) y encontramos 465 artículos de investigaciones sobre ecología en Perú. Encontramos una amplia y creciente diversidad de revistas y autores que publican investigaciones sobre los ecosistemas del Perú, con una importante participación de científicos peruanos, especialmente en los últimos 15 años. Las regiones amazónicas del país fueron las más estudiadas, siendo algunas regiones políticas y ecológicas casi no evaluadas, como Huancavelica, Ayacucho, Apurímac y Tacna y el bosque tropical del pacífico, el páramo y la sabana de palmeras, respectivamente. La mayoría de los estudios se centraron en una sola especie, principalmente animales, y en segundo lugar plantas. La composición y/o distribución de especies fue la principal variable de estudio y la conservación fue el tema principal. La Vida de ecosistemas terrestres (ODS 15) estuvo más representada que otros ODS (58,4% de los artículos), quedando varios otros casi sin estudiar. En general, encontramos que la investigación ecológica sobre los ecosistemas peruanos está sesgada a ciertas regiones, taxa y temas. Esto representa importantes oportunidades para nuevos proyectos, colaboraciones de investigación y alineamiento con las agendas globales de sostenibilidad para una producción de conocimiento más significativa, especialmente considerando el significativo incremento en los resultados de investigación visto en los últimos 15 años.