La utilidad del catéter venoso central (CVC) depende de su adecuada colocación y la radiografía de tórax es el estándar de oro para corroborarla. Para este fin se utilizan pruebas clínicas. El objetivo del presente estudio fue determinar la sensibilidad, especificidad y valores predictivos de cinco pruebas clínicas, para verificar la adecuada colocación del CVC, por lo que se realizó un estudio en 128 pacientes ingresados al servicio de Urgencias, con necesidad de colocación de CVC; se realizaron cinco pruebas clínicas: determinación de arritmias (Ar), retorno venoso (RV), oscilación de presión venosa central (OPVC), medición externa (ME) y gasometría venosa central (GVC); la posición del catéter se corroboró con radiografía de tórax. El 97% presentó adecuada colocación del CVC en la radiografía de tórax; los resultados de sensibilidad (Se), especificidad (Sp), valores predictivos positivo (VPP) y negativo (VPN) de las pruebas fueron: Ar: 59,6%, 50%, 97,3% y 3,8%; RV: 100%, 0%, 96,8% y 0%; OPVC: 99,1%, 25%, 97,6% y 50%; ME: 100%, 0%, 96,8% y 0%; GVC: 96,7%, 0%, 96,7% y 0%, respectivamente. Concluimos que si las pruebas clínicas OPVC, Ar y RV resultan positivas, por sus altos valores de sensibilidad y valor predictivo positivo, podrían sustituir la necesidad de realizar una radiografía de tórax inmediata y no retrasar el uso del CVC, siempre y cuando no se sospechen complicaciones secundarias tempranas a la colocación del mismo.