INTroDuCCIÓNLa terapia electroconvulsiva (TEC) es un procedimiento seguro usado por la psiquiatría para tratar ciertas patologías graves y resistentes a tratamiento farmacológico, tales como la depresión severa, manías, esquizofrenia, delirium y síndrome neurolépti-co maligno, entre otros (Tabla 1). Fue descrita inicialmente en el año 1938 por Hugo Cerletti siendo usada por mucho tiempo sin muchas bases fisiopatológicas y de manera rudimentaria, por lo que se asoció a importantes efectos adversos como fracturas óseas, confusión y trastornos de la memoria. Hoy en día la aplicación de esta terapia es mucho más segura gracias a los cambios tecnológicos en los equipos utilizados en la TEC, que entregan cantidades sustancialmente menores de estímulos eléctricos, junto a los cambios en las normas que regulan su aplicación, monitorización, el uso de anestesia y el entendimiento de las respuestas fisiológicas a la TEC.En esta revisión veremos algunos aspectos generales sobre la TEC, sus indicaciones y la respuesta fisiológica que genera en el organismo. Junto con eso veremos las consideraciones que son importantes para el anestesista, desde la visita preanestésica, técnica utilizada, drogas disponibles y efectos adversos frecuentes.
¿Qué es la TEC?La TEC es un procedimiento que consiste en la aplicación de pequeñas corrientes eléctricas para generar una descarga neuronal sincronizada que dure al menos 20-25 segundos, con el propósito de lograr la mejoría sintomática de diversas patologías. Pese a lo ampliamente usada en psiquiatría y a la mejoría de las técnicas y la práctica clínica de la TEC, los mecanismos por los cuales produce su efecto terapéutico aún son desconocidos. Entre las hipótesis existentes hay quienes afirman que habría cierta influencia sobre el sistema neurotransmisor, ya que se ha demostrado un aumento en la liberación de neurotransmisores de monoamina, particularmente dopamina y serotonina tanto en animales como en humanos 1,2 . Otra hipótesis se basa en el efecto que produce la TEC en el eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal, ya que se ha demostrado que las convulsiones repetidas aumentan la producción y liberación de un péptido hipotalámico que se relaciona con la mantención del estado de ánimo 3 . Diversos estudios indican que la TEC tiene un efecto trófico sobre el sistema nervioso central con la generación de nuevas neuronas en el hipocampo. Además se plantea que la TEC puede tener un rol con factores neurotrópicos, como el demostrado incremento del brain-derived neurotrofic factor (BDNF) 4,5 .Sin embargo, a pesar del conocimiento cada vez mayor acerca de los efectos de la TEC sobre el sistema nervioso central, los mecanismos que explican la eficacia terapéutica en desórdenes psiquiátricos permanecen desconocidos.