El síndrome de buried bumper (SBB) o síndrome de botón de gastrostomía enterrado, es una complicación poco frecuente que se asocia a la gastrostomía endoscópica percutánea (GEP), misma que sufre una migración del tope interno de la sonda hacia la pared gástrica y la pared abdominal, y manifiesta signos de disfunción del botón de gastrostomía. Se describen tres grados de gravedad, en los que la endoscopia es necesaria para el diagnóstico, en tanto que el tratamiento depende del grado de gravedad. Se presenta el caso de una niña de 4 años con parálisis cerebral a quien se le colocó una GEP 1 mes antes y fue llevada a revisión médica por una obstrucción progresiva al paso de alimentación. Se le realizó una endoscopia en la que se le encontró el SBB en grado 3, que fue resuelto con una técnica endoscópica combinada con equipo de laparoscopia.