“…Sin embargo, para proporcionar solidez a una DO, se requieren tres elementos: la norma oficial, la determinación de las instancias calificadas para emprender la certificación del producto y la conformación de un consejo regulador que vea por los intereses de los productores (IMPI, 2016). Como menciona Velázquez (2018), se requiere una nueva política agrícola [en México] y una estrategia decidida para el desarrollo del sector agroalimentario que incluya un sistema, visión, estructura, estrategias, tácticas, capacitación de personal de recursos humanos, dirigido a cada uno de los problemas identificados, pero sobre todo voluntad del personal para ejecutarla. Es necesario que además en el diseño de esta política agrícola se incluyan las DO de forma explícita, como el "Arroz del Estado de Morelos", y que la sinergia entre las instituciones se plantee de forma transversal, desde el municipio, estado y territorio nacional, para construir una estrategia de posicionamiento en el mercado nacional, que además proyecte al arroz al mercado de exportación, pero que al mismo tiempo se propicie un contexto en el que se impulsa la denominación de origen y se fortalece la región en un ambiente de cuidado de la biodiversidad, procurando un desarrollo sostenible.…”