Los países de América Latina se posicionan como un actor relevante en el sistema internacional al concentrar el 31 % de las fuentes de agua dulce del mundo, presentando una serie de conflictos entre diferentes actores que pugnan por el control y gestión de este recurso para la consecución de sus intereses, ya sean sociales o económicos. Este artículo analiza algunas de las tensiones regionales y domésticas generadas por la disponibilidad y gestión del agua en América Latina, a partir de lo cual se exponen las razones por las cuales los recursos hídricos, entendidos en términos de agua potable disponible y reservas de agua (acuíferos), representan un recurso estratégico en la geopolítica de los Estados latinoamericanos. Se concluye que América Latina y el Caribe se posicionan como una región estratégica a nivel geopolítico en el sistema internacional, debido a los recursos de agua potable que ostentan, definiéndose como una zona de interés para actores extranjeros que pretenden abastecer sus necesidades hídricas en un futuro próximo, y como una zona de conflicto entre actores privados, comunidades y Estados.