El confinamiento instaurado durante la pandemia por SARS-CoV-2 y el efecto del virus en la población podrían suponer un factor precipitante para trastornos de salud mental en la población infantil. Objetivo: Comparar los motivos de consulta, diagnósticos al alta, tasa de ingreso y reconsulta de pacientes pediátricos que acuden al Servicio de Urgencias por trastornos de salud mental antes y después del confinamiento por SARS-CoV-2. Pacientes y Método: Estudio descriptivo, retrospectivo. Se incluyeron pacientes menores de 16 años con motivos de consulta relacionados con salud mental durante los periodos preconfinamiento (01/07/2018-01/07/2019) y postconfinamiento (01/07/2020- 01/07/2021). Se comparó la frecuencia de diagnósticos de salud mental, necesidad de inicio de fármacos, de hospitalización y de reconsultas. Resultados: Se incluyeron 760 pacientes (399 preconfinamiento y 361 postconfinamiento). Tras el confinamiento se observó un aumento del 45,7% en la frecuencia de consultas relacionadas con salud mental respecto al total de consultas de urgencias. La alteración del comportamiento fue el motivo de consulta más frecuente en ambos grupos (34,3% vs. 36,6%, p = 0,54). En el periodo postconfinamiento aumentaron significativamente las consultas relacionadas con intentos autolíticos (16,3% vs. 24,4%, p < 0,01) y el diagnóstico de depresión (7,5% vs. 18,5%, p < 0,01). Se objetivó un aumento del 58,8% en los pacientes que ingresaron respecto al total de pacientes que acudieron a urgencias (0,17% vs. 0,27%, p = 0,003) y un aumento del número de reconsultas (12% vs. 17,8%, p = 0,026). No se observaron diferencias en los días de hospitalización (7 días [RIC 4-13] vs. 9 días [RIC9-14], p0,45). Conclusión: En el periodo postconfinamiento se incrementó la proporción de pacientes pediátricos que acudieron a urgencias con alteraciones de la salud mental.