Deseo iniciar este capítulo de agradecimientos a Belén, María y Rodrigo.Cuando me embarqué en esta singladura, no fui consciente de todo el tiempo que les iba a robar. Aun así, me apoyasteis en todo momento, me disteis fuerzas para continuar, y ahora que por fin termina, sois tan felices como puedo serlo yo.Me siento orgulloso de teneros en mi vida.A mis padres, que, aunque ya no están entre nosotros, se esforzaron tanto por enseñarme que sin esfuerzo y sacrificio no se consigue llegar a la meta.A mis directores de tesis, Nieves y Edelmiro, por la confianza que han depositado en mí, por su aliento y ayuda en este largo proceso.