Objetivo: Mostrar los resultados en el corto y mediano plazo del tratamiento endovascular de angioplastia transluminal percutánea (ATP) con balón en pacientes en estado de isquemia crítica por enfermedad arterial obstructiva infrapoplítea. Materiales y Método: Estudio descriptivo, observacional, retrospectivo. Se incluyeron los pacientes hospitalizados entre 2009 y 2018 por isquemia crítica Fontaine III o IV sometidos a una ATP del territorio infrapoplíteo. Se observó como objetivos primarios la preservación de la extremidad afectada y la mortalidad post-operatoria y a un año plazo, y como objetivos secundarios los procedimientos adicionales en pacientes con lesiones o necrosis distales, estadía hospitalaria, complicaciones postoperatorias y necesidad de reintervención. Resultados: Se incluyeron 42 pacientes con un promedio de edad de 66 años (46 – 82), 95,2% tenía antecedentes de hipertensión arterial, 85,7% diabetes mellitus, 57,1% tabaquismo y 28,5% enfermedad renal crónica. Un 83,3% ingresó en etapa Fontaine IV. De las arterias intervenidas 36,2% correspondió al tronco tibioperoneo, 25,8% la tibial anterior, 22,4% la tibial posterior y 15,6% peronea. En 16 casos se realizó una angioplastía percutánea en más de una arteria. No se colocó stents. Se presentaron complicaciones en 3 pacientes, 2 requirieron una amputación mayor y en otro se debió efectuar un nuevo procedimiento endovascular de rescate. La estadía hospitalaria promedio fue 22 días. No hubo mortalidad precoz post-procedimiento. La mortalidad global a un año fue 9.5%. A todos los pacientes en etapa Fontaine IV se les efectuó algún procedimiento adicional, a 31 una amputación menor, 3 cerraron sus lesiones por segunda intención y en otro se realizó un injerto dermo-epidérmico. De los 35 pacientes con seguimiento, 77% preservó su extremidad a un año. Conclusión: La reparación endovascular mediante una angioplastia percutánea en pacientes con isquemia crítica por compromiso infrapoplíteo es un procedimiento seguro y tiene una alta tasa de preservación de la extremidad inicial y a un año de seguimiento, aunque se trató de pacientes con alta incidencia de comorbilidades.