Aunque el Atlántico es un elemento retórico que aparece en multitud de historias y análisis, en realidad es un permanente desconocido. Sabemos de muchos aspectos relacionados con el océano, pero desconocemos aquello que es fundamental; su protagonismo en la vida de las personas y de las sociedades. Esta es la historia de los individuos que lo recorrieron, que lo padecieron y que supieron organizarse a caballo de sus olas. Muchos de ellos fueron anarquistas, o mejor anarcosindicalistas, otros, simples sindicalistas, o también reformistas, que aspiraban a mejorar su vida cotidiana y a deshacerse de las lacras de su oficio.