El escrutinio de más de 100 años de investigación arqueológica en el cuadrante centro-oriental de la península ibérica ha permitido documentar 1.445 asentamientos pertenecientes a la primera Edad del Bronce (c. 2200-1550 ANE). El presente trabajo utiliza la información sobre el emplazamiento, la extensión, la duración y la distribución geográfica de estos lugares de hábitat para identificar las dinámicas de poblamiento vigentes en un espacio de 177.444 km2 a lo largo de aproximadamente siete siglos. Este análisis pone de manifiesto que la distribución y la localización de los asentamientos fueron el resultado de estrategias sociales que pueden definirse como de “enrocamiento” y “atomización” de las comunidades, seguramente en un contexto de conflictos y violencia más o menos latentes. Las causas de esta situación sociopolítica –que resulta excepcional en el contexto del Bronce Antiguo de Europa y el Mediterráneo– se examinan a la luz de los profundos cambios ambientales y sociales identificados alrededor de los siglos XXIII y XVI ANE en muchas regiones de Europa y Próximo Oriente, así como en relación con el desarrollo expansivo y disruptivo de El Argar en el sudeste de la península ibérica.