Artistas y cazadores de ciervos : el papel del ciervo en el arte y la caza del Paleolítico Superior Cantábrico

Abstract

A lo largo de la historia de la humanidad y desde una perspectiva ecológica que integra a los grupos humanos como una especie más en la naturaleza, todos los grupos cazadores recolectores han mantenido una especial relación con alguna especie animal. En el Paleolítico superior cantá-brico esa especie es, sin duda, el ciervo. Tanto desde el punto de vista estrictamente económico como desde un acercamiento cultural. En el primer caso, muchos yacimientos definen su actividad económica como especializada en la caza de estos ungulados, sobre todo durante el Solutrense y Magdaleniense. Otros, condicionados por el biotopo y el ecosistema circundante, eligen otras especies como eje central de capturas, tales como cabras o rebecos. Sin embargo, en el Cantábrico, durante todo el Paleolítico superior, el ciervo siempre aparece como una parte importante de la dieta cár-nica. Así, si en otros ámbitos europeos y americanos, los cazadores recolectores del Tardiglacial pueden ser definidos como cazadores de renos, de mamuts o de bisontes; los cazadores cantábricos de esa misma época podrían ser definidos, por defecto, como cazadores de ciervos.Aunque se haya argumentado en numerosos trabajos, como veremos, que no hay una relación unívoca y directa entre los animales cazados y los representados en el arte rupestre y mobiliar paleolítico (Altuna, 1994), existe, sin duda, una motivación económica y cultural en la presencia constante de ciervos en el imaginario artístico paleolítico. Incluso en algunos momentos concretos donde en otros ámbitos europeos otras especies animales cobran un protagonismo especial, en el cantábrico se representan profusamente ciervos y ciervas según modelos y convenciones rígidamente establecidos. Ello es indicativo de una presencia de esta especie animal que va más allá de lo estrictamente económico y se asienta como un tema central en el universo simbólico de los cazadores recolectores cantábricos.

Ciervos en arquelogía

“…Esta intercambiabilidad se acentúa en las frecuentes escenas en las que se representa un herbívoro atacado por un predador no humano, que se interpretan genéricamente como símbolos tanto del par antinómico Vida-Muerte como del poder como concepto, y en las que el herbívoro puede ser cualquier animal de esta categoría, algunas veces ciervos 23 , aunque son más frecuentes los casos de bóvidos en el papel del animal atacado. Lo que no debemos olvi-21 Al respecto valgan estos cuatro ejemplos, tres del paleolítico cantábrico (Altuna: 1994;Menéndez/ Quesada 2008;Moure 1990) y otro referido a Grecia (Trantalidou/Masseti: 2014). 22 El ejemplo más espectacular de este personaje fantástico es el relieve de bronce aparecido en el templo de Ninhursag de Tell el Ubeid (c. 2500 a.…”

Human–Deer Relations during Late Prehistory: The Zooarchaeological Data from Central and Southern Portugal in Perspective

“…In contrast, the latter is generally related to mosaic habitats with woodlands near scrubland and meadows. Cervids had an important place in Prehistoric societies, not only concerning their palaeoeconomical input but also their sociocultural and ideological significance, as can be seen in the material culture and their depictions in rock art [4,5] or other expressions present, for example, in pottery decoration. The study of human-nonhuman relations gains an added interest when major changes occur in societies, with these studies being involved in larger uncertainty, as is the case of the transition to farming.…”

Os símbolos dos últimos caçadores-colectores do centro de Portugal

“…Ao longo da história da Humanidade, partindo de uma perspetiva ecológica que integra os grupos de humanos como apenas mais uma espécie na natureza, todos os grupos de caçadores-recoletores mantiveram uma relação especial com algum tipo de animal (MENÉNDEZ FERNÁNDEZ;QUESADA LÓPEZ, 2008). Esta relação é muito mais evidente em cronologias paleolíticas, no entanto, cremos que os conceitos básicos destinados a unir o mundo real com o mundo hiperfísico reconhecido nos caçadores-recolectores do paleolítico através da representação de animais, signos e (poucas) guras humanas, não foi abandonada nos primeiros milénios do Holocénico.…”