“…El perfil de un estudiante que decide formarse en un contexto no presencial suele coincidir con el de una persona que tiene otras obligaciones en su vida, bien sean estas laborales, familiares o de otra índole, por lo que la flexibilidad que suelen presentar este tipo de estudios le supone un incentivo a la hora de embarcarse en un grado, en un postgrado o en un máster (Baig et al, 2023;Forero-Arango, 2022;Mosquera-Gende, 2022b;Valdivia-Vizarreta y Noguera, 2022). Otro aspecto que suele implicar un reto para el estudiante online es lograr gestionar y organizar su tiempo y su trabajo a través de la autorregulación, la autonomía y la metacognición; cuestiones que, en gran medida, también se relacionan con la autopercepción que tengan de sus capacidades, así como de su autoestima (Dembo et al, 2006;Gallego-Noche et al, 2017;Garello y Rinaudo, 2012;García, 2015;González-Cabanach et al 2008;Peñalosa y Castañeda, 2021;Perochena-González et al, 2021;Villalonga-Gómez et al, 2023).…”