“…La generación de fuego puede ser obtenida de diferentes fuentes, tales como combustibles fósiles no renovables (carbón mineral, petróleo y gas natural), de alto valor económico, pero también se cuenta con una serie de combustibles de biomasa renovable, tal como lo afirma el autor (Romero, 2010), manifestando que existen biocombustibles sólidos constituidos por materiales lignocelulósicos procedentes del sector agrícola o forestal (paja, restos de podas, leña, cortezas y cascaras), este mismo autor establece que otros biocombustibles usados para la producción de energía calorífica son bioetanol y biodiesel obtenidos a partir de los componentes físico químicos de cultivos como caña de azúcar y maíz. Los autores (Severiche & Acevedo, 2014), afirman que "La digestión anaerobia, o biodigestión, es una tecnología que permite mejorar el aprovechamiento energético tradicional de la biomasa, tanto desde el punto de vista medioambiental, como social y económico. Al mismo tiempo, permite una gestión sostenible de los residuos orgánicos, convirtiéndolos en un recurso para generar biogás (energía renovable) y biol (fertilizante natural)".…”