“…En los últimos años se ha propuesto que el microbioma intestinal y la infección por Helicobacter Pylori, podrían actuar como un patógeno capaz de facilitar la evolución a esteatohepatitis. Se ha sugerido que el Hp podría aumentar los agentes proinflamatorios y la permeabilidad del enterocito, ocasionando mayor paso de lípidos y agentes inflamatorios a la circulación portal y de ahí al hígado, donde inducirían mayor progresión a esteatohepatitis [4] [5].…”