En la clínica diaria de pequeños animales, es común encontrarse con patologías cardiacas, para cuyo diagnóstico se utilizan técnicas imagenológicas como la radiografía, el electrocardiograma y la ecocardiografía. Sin embargo, a pesar de la amplia investigación sobre estas técnicas, todavía es difícil establecer con claridad el pronóstico de estos pacientes y evaluar objetivamente la evolución de dichas patologías; incluso, existen pacientes con cardiopatías ocultas que pueden pasar inadvertidas al examen clínico y a las ayudas imagenológicas. Es por este motivo que en los últimos años se vienen estudiando nuevos métodos para diagnosticar cardiopatías de forma rápida y eficaz; es el caso de los biomarcadores cardiacos, como las troponinas y los péptidos natriuréticos, que en medicina humana y animal se usan cada vez más para ayudar a establecer el diagnóstico, el pronóstico y la evolución de problemas cardiacos, con alta especificidad y sensibilidad. El presente artículo pretende actualizar los conceptos sobre el manejo de biomarcadores cardiacos en el diagnóstico cardiológico de perros y gatos.