El distanciamiento social por COVID-19 puede ser una experiencia asociada a emociones desagradables y estrés, capaz de exacerbar la ingesta emocional de comida y bebidas alcohólicas como forma de afrontamiento. Con el objetivo de explorar la conducta alimentaria y el consumo de alcohol durante el distanciamiento social por COVID-19 e identificar las variables psicosociales asociadas a dichas conductas, se diseñó un estudio transversal exploratorio, descriptivo y correlacional, con aplicación de una encuesta en línea, a una muestra no probabilística de 1110 mexicanos. A partir del análisis de regresión lineal múltiple, se encontró que las variables: estrés, conductas negativas, ansiedad, sexo femenino, convivencia con un familiar con diagnóstico de COVID-19 y lugar de residencia en el interior de la República Mexicana son factores que predicen el consumo excesivo de comida durante el distanciamiento físico, mientras que el apoyo social es un factor protector (R2= .286). Por otra parte, el modelo para el consumo de alcohol durante la cuarentena incluyó las variables estrés y ansiedad como predictores, así como sexo femenino, edad, ocupación y distracción como factores protectores (R2= .205). Se concluyó que las variables psicosociales identificadas posibilitan el diseño de estrategias de intervención orientadas a mitigar y/o potenciar el efecto de dichas variables sobre la conducta alimentaria y el consumo de bebidas alcohólicas en situaciones altamente estresantes como la crisis sanitaria actual.