“…La comorbilidad en nuestra población fue de tipo oncológico y neurológico, y en tercer lugar enfermedades pulmonares, ligeramente diferente de otros estudios, en los cuales las patologías pulmonares crónicas presentaban mayor vulnerabilidad para contraer PIMS. De acuerdo con Gil Guevara et al 8 , en México se identificó que un 45.3% de los casos tenían alguna condición subyacente, como obesidad (25%), cáncer (9%), alteraciones neuromusculares (8%) y enfermedades respiratorias (7%). Por otra parte, en el mismo estudio se mencionó la obesidad como factor de riesgo, tanto en población adulta como pediátrica, para la infección por SARS-CoV-2; sin embargo, en nuestra población se demostró que el 68.8% cursaba con bajo peso, por lo cual se puede considerar que los extremos en el índice de masa corporal son factores de riesgo para PIMS.…”