La polifarmacia en adultos mayores representa un desafío global en salud pública, especialmente en el uso de psicofármacos, requiriendo una gestión más efectiva para asegurar tratamientos óptimos y minimizar riesgos asociados. Métodos: Este estudio descriptivo se basó en el análisis documental de fuentes bibliográficas de Scielo, Medigraphic, Scopus, Science Direct, PubMed y Elsevier, con énfasis en la polineuropsicofarmacia en la población geriátrica. Además, la organización bibliográfica se realizó a través del gestor Mendeley y se utilizaron los descriptores “polifarmacia” y “persona mayor”, obtenidos de la categoría Ciencias de la Salud, seleccionando un total de 11 fuentes bibliográficas en inglés y español de los últimos 5 años. Resultados: los resultados revelan que la polifarmacia es más común en mujeres y personas vulnerables, generando problemas de salud y calidad de vida. Las interacciones medicamentosas pueden potenciarse o inhibirse, afectando negativamente el tratamiento. A nivel global, el uso de medicamentos en adultos mayores ha aumentado, variando la prevalencia de polifarmacia entre países. En Cuba, es frecuente y relacionado con la edad, planteando desafíos en geriatría. Los síntomas asociados van desde problemas cognitivos hasta caídas y mareos, y estudios sugieren una relación entre polifarmacia y tasas de mortalidad más altas. Los efectos adversos de los medicamentos pueden malinterpretarse, afectando la funcionalidad y calidad de vida. Conclusiones: la polifarmacia en adultos mayores es un problema mundial de salud que requiere prescripciones personalizadas y monitoreo de reacciones adversas. Priorizar tratamientos no medicamentosos es esencial, implementando criterios específicos para mejorar la calidad de vida y reducir complicaciones médicas.