“…Consideramos que un factor importante al momento de analizar posibles cambios en la dieta de las especies es la influencia del efecto antrópico sobre los humedales. Por ejemplo, la contaminación de los cuerpos de agua por deseños orgánicos e inorgánicos y la introducción de especies exóticas como la trucha arcoíris (Oncorhynchus mykiss), la cual ha sido propuesta como una amenaza para esta y otras especies de zambullidores (O'Donnell & Fjeldså, 1997;Roesler et al, 2016;Lancelotti et al, 2017Lancelotti et al, , 2020, pueden alterar la composición trófica de los mismos, ya que estos dependen de los macroinvertebrados que proliferan en la vegetación acuática de las lagunas altoandinas (Hilsenbeck, 1979;Martín-Torrijos et al, 2016). Por ello, un estudio sobre la diversidad y riqueza de insectos y otros macroinvertebrados, junto con observaciones sistemáticas del comportamiento de los zambullidores, así como seguimientos para entender las posibles variaciones estacionales en la disponibilidad y diversidad de recursos, pueden ayudar a entender mejor la dieta de esta especie.…”