El huevo de gallina (Gallus gallus domesticus) es uno de los alimentos de mayor consumo a nivel mundial y en el caso específico de Colombia. Según la Federación Nacional de Avicultores-(FENAVI), en el año 2018 el consumo per-capital fue de 293 unidades. Este consumo genera un elevado volumen de cáscara como residuo, lo que lleva a los investigadores a interesarse en su aprovechamiento en diversas áreas, propiciando el desarrollo de emprendimientos. Además, sería un aspecto bastante negativo para el impacto ambiental, debido al manejo inadecuado de los residuos ordinarios, como es el caso de la cáscara de huevo, convirtiéndose en un factor de riesgo para la sostenibilidad y la sustentabilidad ambiental. Esta revisión muestra estudios del aprovechamiento de la cáscara como residuo agroalimentario en diferentes áreas, tales como la industria farmacéutica, química, cosmética y alimentaria. Su alto contenido en carbonato de calcio y otros constituyentes minoritarios como hidróxido de calcio, carbonato de magnesio, fosfato de calcio, sustancias orgánicas y en su membrana proteínas como el colágeno y el ácido hialurónico, la hacen una materia prima única y polifuncional.