Introduction: Complex regional pain syndrome (CRPS) is characterised by the presence of pain accompanied by sensory, autonomic and motor symptoms, usually preceded by a lesion or immobilisation. The clinical course is disproportionate to the initial injury in intensity and in duration. Its distribution is regional, predominantly in limbs. It is classified as type I and type II, according to the absence or presence of nerve injury.
Cases:We present the cases of seven children, 6 girls and 1 boy, aged 7 to 15 years. Three had a history of previous trauma. In 5 cases, the symptoms were located in the lower limbs. Time to diagnosis was between 4 and 90 days. Three patients had clinical features of anxiety and depression. Imaging and immunological studies were performed to rule out differential diagnoses in all the children. Interdisciplinary treatment was performed with physiotherapy, psychotherapy, and gabapentin or pregabalin. All patients had a good clinical outcome, with no relapse in the follow-up period (between 4 and 30 months).Conclusions: CRPS is frequently unrecognised in children, leading to family anxiety and unnecessary para-clinical costs. Paediatricians and paediatric neurologists should be aware of this syndrome in order to avoid delay in diagnosis, unnecessary studies, and multiple visits to specialists, with a view to providing effective treatment. Síndrome doloroso regional complejo tipo i. Análisis de una casuística infantil Resumen Introducción: El síndrome doloroso regional complejo (SDRC) se caracteriza por la presencia de dolor acompañado de síntomas sensoriales, autonómicos y motores. Es precedido habitualmente por una lesión o inmovilización. Su curso clínico es desproporcionado con respecto a la lesión inicial tanto en su intensidad como en su duración. Su distribución es regional, predominando en las extremidades. Se clasifica en tipo I y tipo II según ausencia o presencia de lesión nerviosa.Casos clínicos: Se presentan 7 casos clínicos, 6 niñas y un varón con SDRC tipo I, con edades comprendidas entre 7-15 años. Tres tenían antecedente de traumatismo previo. En 5 casos los síntomas se localizaron en miembros inferiores. La demora diagnóstica fue entre 4-90 días. Tres pacientes presentaron elementos de ansiedad y depresión. En todos se realizaron pruebas complementarias de imagen e inmunológicas para descartar diagnós-ticos diferenciales. Se realizó tratamiento interdisciplinario no farmacológico (fisioterapia y psicoterapia) y farmacológico con analgésicos mayores, gabapentina o pregabalina. Todos presentaron buena evolución, sin recidivas en el seguimiento que fue entre 4 meses y 2,5 años.Conclusiones: El poco reconocimiento de este síndrome en niños, la ansiedad familiar que genera y los costos en paraclínica innecesaria, resaltan la importancia de su difusión entre pediatras y neuropediatras para favorecer su reconocimiento, evitar estudios innecesarios y múltiples consultas a especialistas que retrasan el diagnóstico y el inicio de un tratamiento efectivo.