Contexto: el trasplante renal es la mejor opción de tratamiento en pacientes con enfermedad renal crónica que requieren terapia sustitutiva, ya que mejora su calidad de vida.
Objetivo: describir la experiencia de 27 años en trasplante renal en un hospital peruano.
Metodología: se realizó un estudio observacional, longitudinal y retrospectivo. Se incluyó a todos los pacientes que recibieron trasplante renal en el Hospital Nacional Carlos Alberto Seguín Escobedo de Arequipa, Perú, entre 1993 y 2020. Se recolectaron datos demográficos, clínicos y de laboratorio, según periodos de tiempo y tipos de donante, y se analizó la supervivencia del trasplante renal.
Resultados: de 351 pacientes evaluados, el 56,7?% correspondieron al sexo masculino y la edad media fue de 40,23 ± 12,39 años (rango 13-66), donde el 35,6?% de los trasplantes se realizaron entre los años 2000 y 2010. El 92?% fueron de donante cadavérico y la complicación temprana más frecuente fue la función retardada del injerto. Entre 1993 y 1999, el 23?% de los injertos fueron de donante vivo y tuvieron una mayor mortalidad que el grupo de donante cadavérico, aunque esta no fue significativa, además, hubo mayor mortalidad en los trasplantados del 2011 al 2020. Se encontró una sobrevida del 95?%, 87,9?%, 84,2?% y 64,2?% al año, cinco años, 10 años y 15 años, respectivamente, para el receptor del donante fallecido; mientras que para el receptor de donante vivo fue de 84,6?%, 80,8?%, 80,8?% y 73,1?%, para los mismos periodos de tiempo. Las causas de muerte más predominantes fueron sepsis y COVID-19, donde el 11,7?% fallecieron por COVID-19 y la mayoría de estos pacientes tuvieron un injerto funcionante.
Conclusiones: el presente estudio mostró que el trasplante renal cadavérico predomina en Perú, con una sobrevida del paciente y del aloinjerto aceptable durante el periodo 1993-2020.