“…Introducción Desde la mirada científica, la adolescencia es concebida como un período crítico del desarrollo (Faundez, Vinet, 2009) y del aprendizaje (Iglesias, 2013), donde se cuestiona la propia identidad (Maturana, 2011) y se es más susceptible a involucrarse con tóxicos (Chavez, 2012) y el consumo de alcohol (Vicencio, 2013). Se trata de un quiebre respecto del comportamiento del niño, caracterizado en ocasiones por una rebeldía (Parreño et al, 2011) representada en un sentimiento de indestructibilidad, inmunidad (Aacaporg, 2015) e individualidad (Ugas, 2010), que regularmente ubican al adolescente al alero de conductas riesgosas (Florenzano et al, 2007), entre las que se incluye usar su propio cuerpo como superficie (Ugas, 2010).…”