“…Se han analizado factores propios de los materiales lingüísticos como el tipo de información y el tipo textual, además de variables relativas a los sujetos como el nivel de escolarización o el ámbito de conocimiento especializado de los mismos. Si bien la mayoría de los estudios sobre comprensión de textos y, especialmente, sobre relaciones causales se realizaron con textos narrativos, existen algunos que desplazan la mirada a textos expositivos y fue en ese movimiento que se vio con mayor claridad la necesidad de involucrar otra variable fundamental en el proceso: el conocimiento de mundo del lector 1 (Zunino, 2014(Zunino, , 2016Dery & Koenig, 2015;Graesser, McNamara & Louwerse 2003;León & Peñalba, 2002;Martins, Kigiel & Jhean-Larose, 2006;McNamara et al 1996; Vonk & Kempff, 1992;Noordman & Vonk, 1998;Noordman, Vonk, Cozijn & Frank, 2015;Ozuru et al, 2009;Raiter, 2000;Xiang & Kuperberg, 2015; entre otros). Si bien no existe evidencia concluyente sobre cuál es el efecto de los conectores y de la marcación explícita de las relaciones semánticas/conceptuales en los textos expositivos -esto es, si el impacto es similar o muestra el mismo patrón que en textos narrativos-, estos estudios han demostrado con mayor claridad que: a) el efecto del conocimiento de mundo es decisivo -sobre todo en el nivel de representación más abstracto: el modelo de situación 2 -; b) existe una articulación de modo permanente e inevitable con las marcas lingüísticas presentadas por el texto; c) las estrategias de procesamiento puestas en juego por lectores expertos y no expertos son significativamente distintas.…”