“…Las conductas sexuales que ponen en riesgo la salud de los adolescentes y de los jóvenes, tales como el inicio temprano de su vida sexual y tener sexo con penetración vaginal o anal sin utilizar algún método de protección, ha sido un tema ampliamente investigado en México (Bárcena, Robles, & Díaz-Loving, 2013;Enríquez, Sánchez, & Robles, 2005;Gayet, & Juárez, 2018;Rivera-Rivera et al, 2016;Robles, Frías, Moreno, Rodríguez, & Barroso, 2011;Sánchez, Robles, & Enríquez, 2015) y en otros países (Apaza-Guzmán, & Vega-Gonzáles, 2018;Cabrera, Docal, Manrique, Cortés, & Tobón, 2018;Cañón et al, 2011;Carmona, Beltrán, Calderón, Piazza, & Chávez, 2017;Espada, Morales, & Orgilés, 2014;Holguín et al, 2013;Teva, Ramiro, Bermúdez, & Buela-Casal, 2012). El interés por investigar dichas conductas, responde a los elevados índices de embarazos, abortos e infecciones de transmisión sexual (ITS), incluída la infección por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), que se han registrados en esta población.…”