Este artículo se desprende de una etnografía realizada entre redes translocales de activistas que impulsaron la sanción de la Ley de Cannabis Medicinal en Argentina en 2017. El análisis considera en detalle determinadas actuaciones administrativas y acciones militantes para centrarse en el proceso de metamorfosis de la planta de cannabis y sus derivados durante los últimos años. A través de entrevistas en profundidad, análisis documental y observación participante, se reconstruye el devenir del cannabis en medicamento de uso compasivo; sus oscilaciones entre estupefaciente y herramienta terapéutica; y su más reciente resignificación como producto capaz de promover el desarrollo económico. La investigación propone comprender al cannabis como “sustancia transgresora” (Taussig, 2013) en la que se reúnen la continuidad de modos clasificatorios prohibicionistas y la emergencia de otras formas de pensar sobre –y relacionarse con– la planta, tal como se observa en las trayectorias de vida de aquellas personas que se tornaron cultivadoras, investigadoras, y usuarias terapéuticas.