Los adolescentes son un segmento de la población más susceptible de sufrir problemas de salud mental. Durante el confinamiento social por la pandemia de COVID-19, este grupo fue uno de los más afectados. Este artículo relata el procedimiento sistemático que se desarrolló para proponer una plataforma de virtualización de algunos servicios sobre salud mental: A safe place (ASAP). Las principales características del proyecto son: multidisciplinariedad, participaron especialistas de negocios internacionales, psicología e ingeniería en software; principios de emprendimiento social sustentable, los recursos humanos se condujeron bajo principios humanistas. El objetivo del proyecto fue virtualizar algunos servicios sobre salud mental para atender a alumnos de bachillerato y universidad. El plan de negocios que se llevó se enfocó primordialmente en ofrecer el servicio de la aplicación a escuelas privadas para que de esta manera los alumnos tuvieran la posibilidad de acceder a diversos talleres, pláticas, material audiovisual como podcasts y publicaciones enfocadas en el bienestar de la salud integral de los jóvenes, además de poder brindar dentro de la misma aplicación orientaciones psicológicas a los alumnos que lo soliciten. El proyecto ASAP fue premiado en la 2da. Edición de la Feria del Joven Emprendedor, realizada por la Universidad La Salle Oaxaca, México.