El artículo analiza algunos puntos sobre el estado actual de la desinformación en los procesos de información, principalmente en el contexto mediático. La globalización y su constante movimiento, de carácter socialmente asimétrico y separatista, genera discrepancias colectivas y abre caminos a lo que se denomina imbecilización colectiva. En esta coyuntura, el fenómeno ampliamente abierto de la desinformación en la sociedad resulta en una manipulación y distorsión excesivas de la información. Por tanto, esta discusión presenta, a través de un relevamiento bibliográfico, la urgencia del desarrollo de la alfabetización informacional –cuyo supuesto consiste en el aprendizaje a lo largo de la vida– orientada a la disfunción informativa presente en la comunidad. Dicha alfabetización se denota como una forma de remediación y no como la erradicación absoluta del problema, ya que es fundamental preservar el pensamiento crítico y autocrítico para reducir y controlar la calidad de la información consumida y compartida. Los esfuerzos para combatir la llamada “imbecilización” y disfunción informativa deben darse en diferentes ámbitos de la vida social, involucrando la fusión multidisciplinar de tecnología, educación, cultura, economía y política.