“…La siembra de palma de aceite a escala industrial, ha generado impactos negativos en diversos componentes de la biodiversidad (Aratrakorn, Thunhikorn & Donald, 2006;Fitzherbert et al, 2008;Edwards et. al., 2010;García-Ulloa, Sloan, Pacheco, Ghazoul & Pin Koh, 2012), a través de la degradación de hábitat, destrucción y reemplazamiento de la vegetación nativa, que en el caso de la Orinoquía afecta a bosques húmedos, bosques secos, bosques de galería, pastizales y humedales (Blydenstein, 1967;Bolwing, Pomeroy, Tushabe & Mushabe, 2006;Pinzón, Pardi, Trejos & Midori, 2009), lo que genera cambios en la composición y estructura de la vegetación (Correa & Stevenson, 2010).…”