Skin necrosis must be considered as a syndrome, because it is a clinical manifestation of different diseases. An early diagnosis is very important toa necrosis cutánea debe ser considerada como un síndrome, pues es la manifestación cutánea de diversas entidades clínicas. El diagnóstico precoz y la pronta identificación de la etiología son claves para un tratamiento oportuno y mejorar la sobrevida del paciente.Se recolectaron los casos más demostrativos de necrosis cutánea en pacientes hospitalizados. Se registró la historia clínica, se tomaron fotografías y en algunos casos se realizaron biopsias de las lesiones.
Casos clínicosEn la Tabla 1 se presentan los casos clínicos más demostrativos de necrosis cutánea en pacientes hospitalizados en nuestra institución. Se detalla sexo del paciente, edad, antecedentes mórbidos, fármacos utilizados, clínica con la que se presentaron al momento de la consulta y el estudio de anatomía patológica (AP). Finalmente, se describe el diagnóstico y se menciona el tratamiento que se realizó.
Caso 1: Necrosis por cumarínicosSe ha descrito necrosis cutánea asociada al uso de warfarina, reportándose una prevalencia entre 0,01 y 0,1% de los pacientes tratados. Aunque el mecanismo no está aclarado, se describe un efecto procoagulante transitorio por una rápida caída de los niveles de proteína C 1,2 . El cuadro clínico se manifiesta como edema y eritema de inicio súbito, asociado a dolor o parestesias. En 90% de los casos, la aparición de necrosis cutánea se produce de 3 a 6 días de iniciado el tratamiento, aunque se han descrito casos que se han desarrollado semanas o meses después 3 . El estudio histopatológico revela trombosis y depósitos de fibrina en las vénulas postcapilares sin inflamación 4,5 . El tratamiento es la suspensión del fármaco, transfusión de plasma fresco congelado y aporte de vitamina K endovenosa.
Caso 2: Loxoscelismo cutáneo necróticoEl loxoscelismo es el cuadro clínico secundario a la mordedura de araña del género Loxosceles laeta, el cual presenta una forma limitada a la piel y otra sistémica (loxoscelismo cutáneo visceral), la que