INTRODUCCIÓNDurante las últimas décadas, un amplio debate entre economistas, reguladores y otros expertos en política del agua ha subrayado la importancia de la tarifación del agua como un instrumento básico para alcanzar un uso sostenible de la misma (Rogers y col., 1998(Rogers y col., , 2002Dinar, 2000). Originariamente concebida como un principio económico orientado hacia la eficiencia en el uso del agua, la tarifación ha sido entendida posteriormente como un instrumento propio de la política medioambiental dirigido a implementar el principio de que "quien contamina paga" y, más recientemente y unida a la idea del agua como bien económico y social, ha constituido una de las tres piedras angulares de la definición de "sostenibilidad hídrica" contenida en la Declaración de Dublín (Briscoe, 1996).Frecuentemente, el debate político ha trasladado este principio al concepto más operativo de recuperación completa de costes (RCC) como el principio director para la asignación de precios a los servicios de agua y la financiación de toda su industria.La Directiva Marco del Agua (Dir. 2000/60) hace una referencia explícita a esta idea, exigiendo en su Artículo 9 que la tarifación del agua sirva para fomentar el uso eficiente de los recursos hídricos y que la cuantía del recibo de cada usuario garantice una recuperación "adecuada" de los costes, incluyendo los relacionados con las externalidades medioambientales (European Comisión, 2000). Otras recomendaciones en la misma línea han sido también propuestas repetidamente por organismos internacionales tales como la OECD y el Banco Mundial (OECD, 1987(OECD, y 2000 The World Bank, 1993).Durante los últimos años han tenido lugar numerosos estudios y debates en los que se ha discutido la metodología y los aspectos empíricos de la RCC. Sin embargo, todavía existe una cierta confusión entre distintos conceptos. Así, RCC, tarifación al coste marginal y tarifación incentivadora del uso eficiente del agua son usados en muchas ocasiones como sinónimos, e incluso propuestos un tanto irresponsablemente como la norma "óptima" para la tarifación del agua.
293INGENIERÍA DEL AGUA · VOL. 10 · Nº 3 SEPTIEMBRE 2003
Resumen:La reciente legislación europea adopta el concepto de la recuperación completa de costes (RCC) como directriz para la tarifación del servicio de agua. En este artículo, se analiza el concepto de RCC al tiempo que se aborda la razón económica de su aplicación desde diferentes perspectivas. La idea básica aquí desarrollada es que se trata de un concepto un tanto confuso, ya que los costes se recuperan por definición, estando por tanto el verdadero problema en evaluar cómo se recuperan. Después de presentar diversas opciones disponibles para tratar los subsidios cruzados, se propone un marco contable para analizar la estructura de la recuperación de los costes del servicio de agua. También se incluyen otras formas alternativas de financiación del servicio, según la distancia que las separa con el puro coste marginal a largo plazo. En cualquier caso y aunque se trate normal...