Las pequeñas centrales hidroeléctricas (PCH) se consideran tecnologías limpias y renovables, en el Oriente del departamento de Caldas se planea construir 40 proyectos hidroeléctricos, de los cuales cuatro cuentan con licencia ambiental. El presente artículo tiene como objetivo analizar los impactos ambientales relacionados con estos proyectos y evidenciar las resistencias sociales de comunidades afectadas. La metodología aplicada fue cualitativa con enfoque interpretativo, los datos se obtuvieron mediante trabajos de campo y consulta a fuentes secundarias durante cuatro años. Se concluye que los proyectos hidroeléctricos descritos como a filo de agua no son de bajo impacto debido a que generan pérdida de caudales y escasez hídrica, vulnerando derechos de la población rural, factores que resultan en una revictimización de comunidades que visionan condiciones dignas en tiempo de posconflicto, no solamente opuestas a estos proyectos, sino que además, sus acciones y demandas se orientan a la gobernanza del agua en sus territorios.