“…En línea con lo anterior, se reconoce un estrecho vínculo entre la atención, la percepción y los componentes básicos del funcionamiento ejecutivo: control inhibitorio, memoria de trabajo y flexibilidad cognitiva (Ariës et al, 2016;Canet-Juric et al, 2021;Zelazo et al, 2016). Así, para lograr un adecuado control atencional sobre tareas en desarrollo, es necesario un satisfactorio funcionamiento de la inhibición perceptual, es decir, la capacidad de resistir la interferencia de los estímulos distractores o irrelevantes en las tareas en curso (Aydmune et al, 2022;Brennan et al, 2017;Diamond, 2013;Friedman & Miyake, 2004). Este tipo de proceso inhibitorio ocurre a nivel perceptivo, en una etapa inicial del procesamiento de la información y en situaciones de competencia de estímulos (Introzzi et al, 2016;Aydmune et al, 2017;Aydmune et al, 2021).…”