“…En Ecuador, Gordillo en el año 2019, realizó un estudio sobre la DT y su relación con el riesgo cardiovascular, determinó en una muestra de 111 pacientes, que existió un predominio de sexo femenino, con edades 51 a 60 años y de estos el 5 % fueron hipertiroideos; mientras que los de 61 a 70 años fueron hipotiroideos en el 21 %. Los factores asociados al incremento de riesgo cardiovascular fueron el sobrepeso y obesidad, siendo más frecuentes en los hipertiroideos con el 67 % y en hipotiroideos con el 63 %, de igual manera la hipertensión arterial fue la patología más frecuente principalmente en hipotiroideos alcanzando aproximadamente el 15 % (29 De igual manera, Curotto (22) reconoce la relación entre las HT, el corazón y el SCV; ya que las HT, coordinan funciones del corazón y la circulación, por lo que su alteración se asocia con la presencia de alteraciones hemodinámicas, con efectos similares a los de MCD con FEVI reducida, incitando a la sospecha primaria de enfermedad coronaria, pero que mediante el análisis de HT, donde se estableció el diagnóstico de HT< por niveles de T4 por debajo de lo normal, iniciando tratamiento con levotiroxina y con una posterior reducción de síntomas y mejora de los pacientes, con lo cual se establece una relación entre las afecciones cardiacas secundarias a disfunciones tiroideas como el HT<.…”