INTRODUCCIÓNLas crisis comiciales representan una de las causas neurológicas más frecuentes de consulta en los servicios de urgencias por detrás de las enfermedades cerebrovasculares (1), representando el 0,3% de los pacientes que acuden a urgencias (2); y se considera que como mínimo, una de cada 20 personas experimenta una crisis a lo largo de toda su vida (3). Sin embargo, a pesar de su elevada incidencia, persisten dificultades para realizar un correcto diagnóstico cuando el paciente acude a los servicios de Urgencias tras una supuesta crisis, de modo que solo en un 20-40% de los 27.000 ingresos anuales que se producen en Inglaterra por una crisis comicial se confirma el diagnóstico (4). La falta de pruebas complementarias [0212-7199 (2008)
RESUMENIntroducción: las crisis convulsivas suponen un porcentaje elevado de las consultas en los servicios de urgencias, pero poco es conocido en relación al manejo y derivación de estos enfermos. El objetivo fue conocer el perfil de los pacientes que acuden a urgencias con crisis epilépti-cas, las medidas diagnósticas y terapéuticas, destino de los pacientes tras su valoración, así como la concordancia entre el diagnóstico inicial y definitivo de estos pacientes.Material y métodos: registramos prospectivamente todos los pacientes que acudieron al Servicio de Urgencias del Hospital Clínico de Zaragoza durante el periodo comprendido entre el 1 de noviembre del 2004 y 30 de abril del 2005 y que fueron diagnosticados de crisis comicial. Posteriormente se revisaron las historias clínicas de aquellos pacientes ingresados para determinar el diagnóstico definitivo.Resultados: de los 54.022 pacientes atendidos a urgencias, 137 (0,25%) fueron diagnosticados de crisis convulsiva, requiriendo ingreso hospitalario 61 (44%). Las crisis de novo representaron el 60% de los pacientes ingresados. Un 12% fueron secundarios a alteraciones analíti-cas y un 48% de los pacientes presentaron hallazgos patológicos en la neuroimagen; la falta de cumplimiento terapéutico con bajos niveles plasmáticos de fármacos fue el principal factor precipitante en los epilép-ticos conocidos. Los falsos positivos representaron el 33% de los diagnósticos de urgencias.Conclusiones: encontramos un tercio de errores respecto al diagnós-tico de urgencias, siendo la causa más frecuente de error los síncopes y los ictus. Elevado porcentaje de diagnóstico etiológico por neuroimagen así como la escasez en la realización de electroencefalogramas y estudios toxicológicos.