“…Las abundancias de las 7 especies registradas fueron significativamente variables a lo largo del tiempo de muestreo, sin embargo, no se encontró una relación estadística entre estas y la precipitación, excepto en el caso de R. fulviventer que mostró un aumento hacia los meses con mayor lluvia. El aumento en la abundancia relacionado con la precipitación se ha reportado para otros roedores neotropicales, tales como Peromyscus mexicanus (Rojas-Rojas y Barboza-Rodríguez, 2007), Heteromys catopterius, Neacomys tenuipes, Nephelomys caracolus, Oligorizomys trinitatis, O. fulvescens, Rhipidomys venezuelae, R. venustus, Sigmodon hirsutus (García et al, 2013), entre otros. Estos aumentos en la abundancia pueden deberse a que el período lluvioso propicia la producción y caída de frutos y semillas (Rojas-Rojas y Barboza-Rodríguez, 2007), así mismo, la permanente nubosidad que caracteriza el bosque altoandino en este período reduce el riesgo https://doi.org/10.…”