Este trabajo aborda la complejidad de la violencia contra las mujeres en Brasil, especialmente en el contexto doméstico e intrafamiliar. Analizando las dimensiones física, psicológica, sexual, moral y patrimonial, el estudio pretende comprender las raíces y los mecanismos que perpetúan este fenómeno. Tomando la Ley Maria da Penha como marco legal esencial, el trabajo aborda cómo este tipo de violencia habita no sólo en el ámbito doméstico, sino también en las relaciones educativas y laborales. Se discuten los impactos de la violencia, la falta de denuncias y el aumento significativo de los casos. Se enfatiza la interseccionalidad para entender las asimetrías en las relaciones de género, considerando el racismo estructural. La promoción de la inclusión social, especialmente en el entorno educativo, se considera una estrategia vital, mientras que la construcción de una cultura de paz y la práctica de la no violencia se consideran fundamentales para el cambio social.