“…De los estudios analizados, en dos de ellos se cegó a los participantes y/o al personal que implementaba la intervención (Reme et al, 2019;Sveinsdottir et al, 2020), mientras que en el resto de ellos los autores no aportaron información al respecto. En cuanto a la evaluación de los resultados, cinco estudios estaban claramente cegados (Areberg & Bejerholm, 2013;Bejerholm et al, 2015;Reme et al, 2019;Rodríguez-Pulido et al, 2018;Sveinsdottir et al, 2020), aunque solo uno de ellos fue valorado como de bajo riesgo de sesgo (Sveinsdottir et al, 2020). En el resto de los estudios los evaluadores conocían previamente la intervención asignada de los participantes durante el ensayo (Bond et al, 2015;Christensen et al, 2019;Khalifa et al, 2020;Killackey et al, 2019;Michon et al, 2014;Poremski et al, 2017;Viering et al, 2015).…”