“…Entre estos organismos, las arañas adquieren cada vez mayor importancia debido a su capacidad de regular y evitar daños producidos por los diversos fitófagos que atacan a los cultivos (Barrientos, Villalba, Alvis-Davila, & Garcia-Mar, 2010). De este modo, en los sistemas agrícolas los estudios referidos a Araneae han ido incrementándose progresivamente (Riechert & Lockley, 1984;Nyffeler, Sterling, & Dean, 1994;Lee & Kim, 2001;Armendano & González, 2011;Almada, Sosa, & González, 2012). Particularmente en cultivos de cítricos se pueden citar los realizados por Carroll, 1980;Mansour & Whitecomb, 1986;Van Den Berg, Dippenaar-Schoeman, Deacon, & Anderson, 1992;Breene, Dean, & Meagher, 1993;Benamú Pino, 2004;Avalos, Bar, Oscherov, & González, 2013; que focalizan la fauna completa de arañas lo cual cobra importancia para el control de las poblaciones de algunos fitófagos (Foelix, 1996).…”